Como evitar las varices

Ahora que parece que vamos dejando atrás el invierno, empezamos a sacar del armario las faldas, y es cuando nos damos cuenta de esas antiestéticas venas azules y/o verdes en las piernas. Muchas veces esas venitas o varices son el reflejo de un problema de circulación más grande.

Como dijo a muchos pacientes “¡las venas se tienen y se deben cuidar!“, ¿pero cómo hacerlo? Adoptando buenos hábitos, como por ejemplo caminar al menos 30 al día, evitar el calor, llevar ropa adecuada, etc.

¿Cómo se originan las varices?

Si vuestras piernas están pesadas, hinchadas y que aparecen varices, es que vuestra sangre circula mal. Os preguntaréis ¿a qué se debe?… Nuestras venas están equipadas de pequeñas válvulas que ayudan a la sangre a subir hacia el corazón. Cuando las válvulas no funcionan bien, la sangre se estanca o bien refluye hacia abajo del cuerpo. Las venas acaban dilatándose y formándose las varices. Entonces, ¿no se puede hacer nada contra esta insuficiencia venosa?… SI. Con gestos simples y evitando ciertos malos hábitos, podéis mejorar vuestra circulación venosa.

Como se producen las varices

Evitar varices haciendo ejercicio

El deporte suave como la marcha rápida, la natación, etc. Os pueden hacer mucho bien. Con la contracción progresiva y regular, los músculos de pantorrilla ayudan a la sangre a subir hacia arriba del cuerpo. Cuando os movéis y/o camináis, unos músculos bien tonificados permiten bombear mucha más sangre que unos músculos débiles, y cuanto más sangre se bombee fuera de las piernas, menor será el riesgo de que vuestra venas se dilaten y se dañen las válvulas.

Por el contrario, los deportes que exigen enormes esfuerzos como el tenis, el futbol o el rugby están desaconsejados. La presión abdominal puede bloquear el retorno venoso. Por ejemplo, cuando se levantan pesas de cierto peso, no olvidar de expirar. De lo contrario, la presión abdominal aumenta y las venas se dilatarán para poder evitar el bloquearse.

Evitar varices estirando las piernas

En el trabajo, ¿permanecéis muchas horas sentados o de pie? No es bueno. Para activar la circulación, es necesario hacer una pausa para poder caminar unos minutos.

Si estáis muchas horas de pie, tenéis que hacer trabajar los músculos de la pantorrilla. Para retrasar la aparición de varices, el método más eficaz consiste en mantener la circulación sanguínea en las piernas. Los músculos de la pantorrilla pueden compararse con el corazón de la circulación venosa. Si estiráis y flexionáis el pie lo suficientemente fuerte como para contraer los músculos de la pantorrilla, ayudaréis a bombear el equivalente a una taza de sangre fuera de la pierna. También podéis apretar vuestros pies, el uno contra el otro en vuestros zapatos,  o poneros varias veces en puntillas. Agitar o sacudir la pierna no es suficiente, tenéis que hacer trabajar los músculos.

Evitar varices evitando las fuentes de calor

Los baños o duchas demasiados calientes, la exposición de las piernas al sol, la calefacción de coche orientado a los pies, o los calefactores dirigidos a las piernas, etc. hay que evitarlos ya que dilatan las venas.

Evitar varices evitando usar ropa ajustada

Los pantalones de tela que os aprietan y simulan la tripa o los jeans que os comprimen los muslos hay que dejarlos en el armario. Mejor una ropa amplia en la que os sintáis a gusto. Evitad los calcetines de media que aprietan la parte superior de la pantorrilla y también las fajas ya que pueden bloquear el movimiento de la sangre hacia arriba de las piernas. La pared venosa debe dilatarse para superar este bloqueo y las válvulas dejan de estar ajustadas y empiezan a ceder, dejando a la sangre acumularse, y dando lugar a la aparición de varices.

En muchas farmacias podéis comprar pantys y medias, calcetines de media o ejecutivos y calcetines especiales que favorecen la circulación sanguínea en las piernas. Esta ropa interior ejercen una ligera presión gradual en la pierna, desde el pie hacia arriba, ayudando a reducir la dilatación de la pared venosa. La presión es mayor en el tobillo y disminuye gradualmente a medida que subimos hacia la rodilla y cadera. Yo recomiendo a mis pacientes el utilizar diariamente calcetines, medias o pantys de contención que ejerzan una presión de 15 mm Hg a 20 mm Hg. Antes unas varices más importantes se podrían prescribir una presión de 30 mm Hg a 40 mm Hg.

Evitar varices evitando el uso diario de tacones altos

Los tacones altos no están de moda para nuestras venas. Si todos los días lleváis tacones de más de 2,5 cms los músculos de vuestras pantorrillas no bombearán eficazmente la sangre hacia fuera de la pierna. Lo podéis comprobar en vuestra casa. Experimentar las contracciones de la pantorrilla cuando lleváis zapatos planos y luego pasad a los tacones altos. El pie se desplaza hacia adelante pero no sentís las contracciones de la pantorrilla mientras camináis.

La altura ideal de los tacones: 2 cms. De esta forma, vuestro pie podrá caminar correctamente mientras la sangre será “empujada” hacia arriba de la pierna.

Evitar varices comiendo bien y controlando el peso

Una alimentación variada y equilibrada es la base. Algunos alimentos son muy recomendables. Los antioxidantes por ejemplo protegen los vasos sanguíneos, y podemos encontrarlos en pimientos, fresas, tomates, cítricos, aceite de oliva, etc. Las frutas y verduras también ayudan a proteger y tonificar las venas. Y tampoco olvidarse el hidratarse bien regularmente (un litro y medio a dos litros todos los días). El agua es un excelente drenante que ayuda a eliminar toxinas. Sin embargo, reducir el alcohol, el café y olvidaros del tabaco.

La mayoría de los estudios por no decir la totalidad, mencionan la obesidad como un factor que contribuye a la aparición de varices y de telangiectasias o arañas vasculares (una red de venas dilatadas). Si el sobrepeso parece que contribuye a generar las varices, habría que plantearse una reducción del peso en base a una dieta y a la realización de ejercicio.

Las fluctuaciones hormonales durante el ciclo menstrual pueden afectar a las venas

Las fluctuaciones hormonales, tanto antes de la menstruación como en medio del ciclo (durante la ovulación) provocan una relajación de la pared venosa. En estas fases, las venas contienen un mayor volumen de sangre, lo que aumenta la presión sobre las válvulas. Si tenéis la impresión de que vuestras venas están más hinchadas de lo habitual, es verdad. En ciertas mujeres, los anticonceptivos orales o los estrógenos de sustitución producirán los mismos efectos en las venas. El llevar medias de contención, el ejercicio y la reducción de peso son medidas eficaces para reforzar la pared venosa.

El embarazo puede hacer que las venas se hinchen

El embarazo provoca el aumento de varias hormonas. Los estrógenos tienen como efecto la relajación de los músculos lisos y de las fibras de colágeno en general, lo que podría contribuir a la dilatación de la pared venosa. Además, durante el embarazo el volumen sanguíneo aumenta un 40% durante el embarazo. También, cuando una paciente me comenta que le han aparecido de repente varices o arañas vasculares, una de las preguntas que le hago es “¿Estás embarazada?”. El estado de las venas pueden cambiar muy rápidamente, incluso en 5 semanas de embarazo, cuando incluso algunas mujeres son saben que están embarazadas.

En torno a un 70% de las mujeres embarazadas que tienen predisposición genética a las varices y telangiectasias, acaban desarrollando varices. Afortunadamente, la mayoría de ellas desaparecerán a las 4-6 semanas de haber finalizado la lactancia. En muchas mujeres después del tercer embarazo, las varices no desaparecen y deben ser tratadas.

 Conclusión evitar varices sin cirugía

Si a pesar de todos los cuidados anteriormente indicados al final aparecen las varices o ya las sufris, afortunadamente ya se pueden tratar el 100% sin cirugía. Gracias al método FIVE ya no hace falta pasar por quirófano para eliminar las varices. Hasta ahora se podían tratar hasta el 90% de los problemas vasculares y el resto 10% se tenían que tratar en el quirófano debido a su tamaño, pero gracias al método de Fibrosis Venosa (FIVE) ya se pueden tratar.

Dra. Petra Navarro, directora médica de Instimed

Dra. Petra Navarro, directora médica de Instimed

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