Descubre nuestros consejos para cuidar la piel en invierno

Porque el frio seca y desvitaliza la piel de nuestra cara, en esta época del año es recomendable realizar ciertos cuidados. Por eso, os vamos a dar unos consejos, trucos y productos eficaces para reparar y proteger vuestro rostro en invierno.

El frio es el enemigo público número uno de la cara. Agrede a la piel atacando directamente a la capa protectora de la epidermis denominada manto hidrolipidico. El resultado es una piel que se agrieta y se apaga, y para contrarrestar este mal, hace falta hidratarla adecuadamente.

cuidar la piel en invierno

Hidratar la piel de la cara en profundidad

Desde el mes de noviembre, con el cambio de tiempo, la piel tiene otras necesidades. La composición de los ácidos grasos de la piel cambia en invierno. Como es lógico, se vuelve más seca. Para la cara es aconsejable elegir una textura muy nutritiva como una crema lipídica en lugar de un aceite. Penetrará profundamente en la epidermis y permitirá aliviar la sensación de tirantez o de picor sin el riesgo de grasa en la piel o de producir granos. Si se quiere favorecer la hidratación y la reparación cutánea por la noche, la mayoría de las mujeres necesitamos añadir un cuidado suplementario por la mañana, ya sea como base de maquillaje. Por el contrario, para desmaquillarse hay que evitar los productos espumosos, y utilizar una leche o agua micelar que son más suaves para la cara.

Proteger el cuerpo de las agresiones

Para el cuerpo hace falta como mínimo leche hidratante cada dos días o tres días. Para las pieles muy secas, utilizar texturas más ricas como cremas o pomadas, y aplicarlas a diario.

Otro punto importante es mantener calientes las manos y los pies. Cuando nuestras extremidades tienen frio, la sangre no fluye, por lo que la piel no se nutre y se seca. Se vuelve más frágil y cicatriza peor. Se puede utilizar una crema reparadora para las manos una o dos veces al día, ya que es más eficaz que una simple crema hidratante, contiene acidos grasos buenos y agentes cicatrizantes.

Evitar dañar la piel

Incluso en invierno, el tema del famoso SPF hay que tenerlo en cuenta. En la ciudades no hace falta protección solar, pero por el contrario, si vamos al campo un día soleado o vamos a esquiar, la nieve refleja un 80% de los rayos ultravioletas, es indispensable protegerse al piel.

Si tenemos una piel que aumenta su enrojecimiento en invierno, es recomendable emplear una crema anti enrojecimiento que regularice la capacidad de los pequeños vasos sanguíneos de dilatarse o, una crema BB.

Y por último, si no os gustan las texturas grasas o espesas, os recomiendo ponerse una mascarilla hidratante dos o tres veces por semana, insistiendo en las zonas donde la piel es más frágil. Un sérum también puede ser eficaz si tenemos síntomas de tirantez o si la piel esta áspera tras el baño, como complemento de la crema habitual.

Adaptar la alimentación

El consejo número uno es: beber, beber y beber (agua, evidentemente 😉 ). En verano tenemos el reflejo pero en invierno nos olvidamos a menudo. Y no sólo sudamos de la misma forma, sino que también, vivimos y trabajamos en lugares caldeados, con la atmósfera muy seca. Y para tener una piel sana es importante tenerla hidratada, y la base de toda hidratación cutánea es ingerir agua. Una la adecuada hidratación de la piel es una medida clave de anti-envejecimiento frecuentemente olvidada.

Algunos alimentos son recomendables incluir en nuestra alimentación invernal. En particular los que contienen Omega 3, ácidos grasos esenciales, que la piel necesita para asegurar la cohesión celular y la impermeabilidad de la epidermis. Encontramos Omega 3 en el aceite de borraja, de colza, pescados grasos, frutos secos, canónigos, etc. Y por el contrario, es mejor evitar los alimentos industriales y precocinados, ya que contienen grasas saturadas que agravan el fenómeno de la irritabilidad de la piel en invierno.

Si seguís la mayoría de mis consejos vuestra piel debería pasar el invierno sin problemas.

Dra. Petra Navarro, directora médica de Instimed

Dra. Petra Navarro, directora médica de Instimed

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